La educación universitaria en Australia se enfoca hacia el libre pensamiento e innovación, donde los estudiantes son motivados a generar nuevas ideas y desarrollarlas para aplicarlas en la vida real. La mayoría de las universidades ofrecen programas de práctica empresarial durante el último año de estudio, con el fin de que el estudiante tenga la posibilidad de practicar todos sus conocimientos adquiridos en un ambiente de trabajo.
La investigación es un elemento indispensable en las universidades australianas. Estas invierten constantemente en instalaciones de alta calidad, tecnología informática y laboratorios para que sus estudiantes tengan acceso a los últimos equipos tecnológicos.